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jueves, 27 de diciembre de 2007

Oh mis gatitos!

Yin_and_Mao_by_tamaokibenkyo


Los animales a veces pueden ser unos de los seres más ingratos que jamás hayan pisado este planeta, se acostumbran a que los alimentes, les des aguita todas las mañanas y los regalonees de vez en cuando, pero cuando tú quieres un espacio de tranquilidad, simplemente no te lo conceden. Usualmente los gatos son egoístas y celosos, si no los pescas, te molestan hasta conseguirlo, y es aquello lo que he estado sufriendo durante los últimos meses.

Debido a la pasada enfermedad de mi mamá, los mininos actualmente no pueden circular dentro de la casa, por lo tanto le acomodamos todo en el patio, pero al parecer, los perlas estaban tan acostumbrados a nuestras camas, que no dejan de reclamarla. Todo comienza en las apacibles mañanas de verano, cuando apenas sienten que abro los ojos ( no sé como lo percibe O.O), la gorda comienza a maullar, y no son despacitos ni bonitos, si no que maulla enojada, hasta que obligada por el ruido y los rasguños en la puerta, no logro conciliar más el sueño a las 1 de la tarde.

A medio vestir, salgo al patio y le doy su comida, pero el trayecto que hago para conseguirle el agua es el arduo, a la muy #$%%&%%#" se le ocurre entrar y esconderse por diferentes lugares, juega a las escondidas sin mi concentimiento, me hace gracias en el pasillo para que yo la pesque, y sorprendentemente: debido a su lindura congenita y mi debilidad por los gatos, lo consigue ¬¬

Todo eso no acaba allí, para evitar que entren, hemos construido realmente una fortaleza en la puerta del patio, con alambres y weas...pero aquello no evita que los angélitos entren. Primero era la Copi, todos los días ingresaba saltando el trablón y se escondía en el entretecho (ese q se parece al de sexto sentido), pero los gatos aprenden rápido, y la gorda ahora lo hace, pero no es una vez por día, sino 7, 8 y a veces 10 veces ><, ya le hemos dicho a mi hermano q instale todo un enrejado de ultima generación en la puerta para evitar estas amenazas.

Lo más gracioso de todo esto, es que cuando yo salgo al patio a jugar con ellas y con gatín, los muy no me pescan! ¬¬ me quedan mirando con cara de lerdos y se van al techo o deciden descanzar después de toda la escalada que se pegaron durante la tarde, dejandome sola y abandonada en mi propio dominio!...